Dejar morir a un perro ¿ARTE?

El artista costarricense Guillermo Vargas, más conocido como ‘Habacuc’, desató polémica al dejar morir de hambre a un perro en una de sus ‘composiciones’ para una exposición de arte en Nicaragua.

Montó una instalación en una feria de arte en Nicaragua donde utilizó a un perro callejero al que dejó morir de hambre. La composición incluía una frase, escrita con comida para perro, que decía ‘Eres lo que lees’. Además añadía un audio con el Himno Sandinista al revés, fotos y un incensario, donde se quemaron 175 piedras de crack y una o­nza de marihuana.

La obra se remataba con un perro famélico, enfermo y con hambre atado con una cuerda a la esquina de la sala. Él mismo lo capturó de un barrio marginal de Managua. Al parecer, el animal murió tras un día en la exposición. El artista comentó que su obra fue un homenaje a Natividad Canda, nicaragüense que murió tras ser atacado por dos perros rottweiler en un taller en Cartago.

Defensores de los animales repudiaron ese trabajo de Habacuc, lo descalificaron como obra de arte y sugirieron que el artista sea excluido de la Bienal Centroamericana Honduras 2008, ya que él será uno de los seis representantes del país.

Penosamente la prestigiosa Bienal Centroamericana de Arte decidió, incomprensiblemente, que la salvajada que acababa de cometer este sujeto era arte, y de este modo tan incomprensible Guillermo Vargas Habacuc fué invitado a repetir su cruel acción en dicha Bienal en 2008.

Según el artista, lo importante era mostrar la hipocresía de la gente y ver cómo un perro se convierte en el foco de atención cuando está en una galería y no cuando está en la calle.


El mundo no está amenazado por las malas personas, sino por aquellos que permiten la maldad
Albert Einstein